RECURSOS PARA LAS FAMILIAS












¿Cuándo empieza la adolescencia?
Algunos estudiosos del tema, sitúan la adolescencia a partir de los 11 años, esto quiere decir, que a esta edad muchos de nuestros estudiantes de 1º de ESO (Educación Secundaria Obligatoria) ya tienen algunas de las características que se acentuarán más tarde, en la adolescencia. Yo no soy ninguna estudiosa oficial del tema pero sí que me interesa puesto que trabajo con alumnado de 11 a 18 años y, como tutora, es fundamental saber e intentar comprender qué es lo que les pasa.

¿Qué les pasa a partir de los 11?
A esta edad empiezan cambios muy importantes tanto físicos como en la manera que tienen de ver el mundo, su realidad. A estos cambios, se les une el cambio de su sitio de referencia; pasan de su colegio, su "mini-mundo" del que son los mayores, al instituto, que es el mundo de los que ya están allí y del que ellos aspiran a hacer propio.

¿Por qué hacen ciertas cosas?
Un elemento fundamental de la adolescencia y que cuesta mucho aceptar a padres y madres es que la familia deja de ser el centro de su mundo; ahora, una de sus prioridades principales es ser miembro reconocido de su grupo de iguales, tener un grupo de personas con relación de amistad en el que sentirse cómodos/as y valorados/as. Lo buscan aunque eso les suponga separarse de su familia y hacer o aceptar cosas que antes ni siquiera habían pensado.

¿Qué hacer para que todo sea más fácil?
Es una etapa difícil, tanto para familiares como para sí mismos, por lo que, para que todo discurra de la mejor manera posible y desde la experiencia que tengo como tutora y profesora les hago las siguientes recomendaciones con la mayor humildad y esperando que les resulten útiles:
  1. Acuda a las reuniones que organice su tutor/a; es fundamental acudir a la primera reunión de principios de curso, para conocerse en un ambiente relajado.
  2. Propicie el uso de la agenda escolar como herramienta de trabajo, ayúdele a que esté limpia y ordenada, revísela de vez en cuando, pida cita a través de ella y comuníquese con el tutor/a y el resto del equipo educativo de su hijo/a.
  3. Confíe en el tutor/a de su hijo/a. No hable mal del mismo delante de sus hijos/as. Muchas veces he escuchado: "Mi hijo nunca ha hecho nada así" o " Mi hija nunca me ha mentido". Piénselo bien, ¿qué necesidad tiene el tutor/a de mentirle a usted? Los chicos y las chicas comienzan a experimentar a esta edad y fuerzan los límites. Si duda de algo, coméntelo con el tutor/a o profesor/a.
  4. Es muy importante fijar unos límites claros y dejar establecido de antemano las consecuencias de no respetarlos (si es consensuado mejor), esto les dará seguridad.
  5. Acepte los cambios que está experimentando, procure recordar su propia adolescencia para comprenderle mejor y, sobre todo, procure escucharles. Conseguiremos que aprendan a escuchar también y favoreceremos la comunicación y la confianza en la familia y con el centro educativo.
  6. Procure ser su apoyo en todo momento, que sientan que ustedes están detrás de ellos para ayudarles si tropiezan; invíteles a solicitar ayuda de sus profesores/as, la mayoría del profesorado es vocacional y gusta de ayudar al alumnado que se lo pide.
El fracaso escolar tiene muchos responsables en el que incluyo tanto a familiares, centros escolares y administración y deberíamos de colaborar para reducirlo; pero a mí me preocupa mucho más el fracaso social de todos por no conseguir que los niños y niñas de hoy en día sean los hombres y mujeres del mañana que sean capaces de vivir en sociedad y mover hacia delante nuestra cultura e industria.

A continuación les dejo algunos enlaces a páginas que creo pueden serles de ayuda: 
Si encuentro más los iré adjuntando...





No dude en dejar sus comentarios que seguro enriquecerán mi experiencia como tutora y docente.

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